El DJI Ronin 4D combina la cámara Zenmuse X9 con un gimbal integrado de 4 ejes de estabilización, enfoque tipo LiDAR y sistema de control y transmisión de vídeo de una unidad.
Con la salida de su revolucionario producto, DJI presenta su cámara más potente hasta la fecha, palabras propias de los creadores. Su sistema de imagen inteligente es potenciado por un chipset interno, el CineCore 3.0, ofreciendo un códec RAW de 8K. Este viene por defecto con reproducción avanzada de color, funciones avanzadas a partir de su IA de gran rendimiento, provocando así un control multienlace que permite procesar imágenes a baja latencia.
Características técnicas y grabación de vídeo
Como mencionábamos al principio del artículo, la DJI Ronin 4D incorpora una cámara gimbal Zenmuse X9 de fotograma completo, disponible tanto en 8K como 6K. El códec por excelencia sigue siendo el H.264, haciendo que tanto la X9-8K y la 6K se valgan de él para grabar internamente en Apple ProRes y ProRes RAW. Vale decir que la X9-6K también admite 4K a 120fps. Por otro lado, la 8K llega a los 75fps con 14 paradas de rango dinámico, dando un abanico más extenso a su calidad cinematográfica.
Como otros productos explorados en equipo de cámara, la Ronin 4D también consigue superar orgánicamente los contextos donde la luz se puede complicar o no ser del todo nítida. Gracias a su sistema de Color de Cine (DCCS), la cámara ofrece tonos naturales de piel y consigue estabilizar el tono general aunque se trabaje con otras cámaras en el set. Además de esto, los filtros físicos ND de nueve paradas ayudan a ajustar las condiciones lumínicas si estas cambian drásticamente de manera fugaz.
Para poder eliminar la dichosa shaky cam, o movimientos verticales que puedan emular dicha condición, la Ronin 4D incorpora un eje Z el cual permite convertirla puntualmente en una steady cam de supervivencia, consiguiendo así los planos necesarios para hacer avanzar la producción. Esta fluidez se consigue gracias a un nuevo algoritmo avanzado que procesa cada entrada con sensores ToF, sensores duales, IMU integrada y barómetro.
Para completar todas estas características, la Ronin 4D se vale del sistema ActiveTrack Pro que, combinado con la inteligencia artificial interna, puede enfocar objetos o personas a más larga distancia sin perder un frame de calidad.
O3 Pro
Con su nueva tecnología de transmisión O3 Pro, el transmisor de vídeo de la cámara emite una señal Full HD de 1080p a 60fps a monitores remotos que se encuentren hasta una distancia de 6.000 metros. Siendo compatible con las frecuencias 2,4 GHz y 5,8GHz, la Ronin 4D incorpora familiaridad con las frecuencias DFS, mejorando la transmisión de archivos inclusive en un espacio falto de cobertura y Wi-Fi cuestionable.
En cuanto a monitores, la Ronin 4D prioriza los de 1.500 nits y 7 pulgadas, integrado en su receptor de vídeo inalámbrico. Al contar con un sensor giroscópico, el operador puede manipular la cámara remotamente y con la máxima comodidad. Esta también puede conectarse a los volantes DJI Master Wheels, la DJI Force Pro o el nuevo Follow Focus de tres canales.
Cuestión de batería
La DJI Ronin 4D presenta tres tipos de almacenamiento: USB SSD, tarjeta CFexpress Tipo-B y PROSSD de 1TB. Emulando sus hermanas Ronin 2 y Inspire 2, la Ronin 4D utiliza una batería inteligente TB50, llegando a alcanzar las 2 horas y media de grabación de manera constante, permitiéndole también rodar en situaciones climatológicas extremas.
Disponibilidad
La DJI Ronin 4D 6K estará disponible este mismo diciembre. Por el contrario, su versión 8K no tiene fecha oficial, solo un simple «más adelante».
Esperemos que este adelante no implique el 2023.
